Temeroso como siempre te acercas, ¿acaso tanto miedo de doy?, vamos solo un poco mas cerca; finalmente te tengo de nuevo frente a mi con esa mirada confusa, dudosa, con miedo. Una sonrisa irónica no puede evitar formarse en mi rostro.
-Enserio te asusto tanto- esa no fue una pregunta fue mas bien una afirmación, y tu mirada lo confirma- que decepción- bajas la cabeza, se que eso es lo que mas duele; pero en fin, esa no es la pregunta- oye cuando te hable, quiero que me mires a los ojos- no veo disposición en ti, no te atreves acaso- ahora- eso fue una orden, ahora lo veo en cámara lenta como de nuevo tu mirada se encuentra con la mía- bien.-
Ah, no tienes idea que bien se siente tener el poder, el poder de una vida, el poder de controlarte. Esa sonrisa de superioridad de nuevo se asoma en mi rostro. Eres patético.
Dime, ahora que has tenido el placer de conocer mis gustos, mi manera de ver el mundo, mi modo de expresarme, mi verdaderos instintos y descomunales placeres- procuro hacer una pausa entre una revelación y otra, esperando tu reacción.-¿Aún te intereso?
La pregunta te cae como agua helada lo puedo ver en tu rostro, siempre como un libro abierto. No sabes que responderme, lo se. Una parte de mi me teme, pero otra parte se que aun me ama, aun después de lo que te he hecho me amas. No lo puedo creer.
Tu mirada indecisa busca la mia, la respuesta es clara, pero no correcta.
-Si-
01/02/09
